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«EL ZORRO» un Depredador Sexual de Niñas, testimonio Nro. 2

20 de abril del 2018
Los depredadores sexuales tiene una fijación por ejemplo: La edad de la víctima y una metodología por ejemplo: La forma con la atraen a sus víctimas, es siempre la misma sin dejar de perfeccionar detalles, así actúa el apodado ZORRO.
Por eso cuando uno habla con las víctimas que no se conocen entre sí, puede detectar la metodología, su forma de “CAZAR”, en este caso en particular si leemos detenidamente los dos testimonios veremos que la similitud al actuar, los detalles calcados en los dos ataques y además nos abrirá la puerta a una pregunta que causa escalofríos, ¿Cuántas niñas de la localidad fueron y son víctimas del Zorro durante todos estos años?
Estamos ante el caso de un Depredador Sexual de Niñas ACTIVO, nunca fue investigado como un abusador serial sino que tiene algunas denuncias aisladas y según las fuentes paso un tiempo preso por el delito de abuso, si la justicia tomaría este caso con la seriedad que merece la situación, estamos sin lugar a dudas ante el mayor Depredador Sexual de Menores de la historia de Santa Cruz.
A pesar de que es un tema extremadamente complicado de tratar y actualmente casi con seguridad el zorro tiene contacto con nenas menores, lo que si tenemos acreditado como dato factico es: En el primer testimonio que se publicó por Facebook y esta página reprodujo la víctima tenía 12 años y hoy tiene 24, en el segundo caso la victima igual tenía 12 años y hoy tiene 33.
Eso quiere decir que entre un caso y otro pasaron 11 años, 11 años donde por las características compulsivas de los abusadores sin lugar a dudas siguió abusando de nenas, y otra vez la misma pregunta, ¿Cuántas niñas de la localidad fueron y son víctimas del Zorro durante todos estos años?
Testimonio Nro. 2
Truncado Informa: Contáme lo que puedas y quieras, yo te voy a ir preguntando lo que no quieras contestar no lo cuentes.
-Al Zorro lo conozco porque mi mama trabajaba en el complejo –de gas- y yo iba siempre el me regalaba golosinas y me mostraba revistas porno que al principio vi y después ya no quería ver, una vuelta mi mama me mando a dejarle una carta me recibió la carta me hizo pasar a su casa me abrazo manoseo me dio besos le pedí que me lleve a mi casa que mi Mamá me estaba esperando y entonces me llevo en su auto en ese tiempo tenía un senda gris, pero me pidió que vaya después u otro día obviamente no fui.
Truncado Informa: ¿Cuantos años tenías?
-12.
Truncado Informa: ¿Dónde vivía él?
– Vivía por la Mitre entre-Nos reservamos esos datos-
Truncado Informa: ¿Me contás lo de las revistas porno?
– Cuando estaba de sereno en el complejo de gas me llamaba a tomar mates y como siempre me daba golosinas y me mostraba las revistas que se llevaba de su casa, las primeras veces las vi por qué bueno me daba curiosidad y bueno fui yo la que acepto pero después ya no quería ver me daba asco.
Truncado Informa: Es una cuestión que se hace desde la inocencia no tengas culpa por eso, ¿Volviste a ir a su casa?
-No.
Truncado Informa: ¿Después te siguió molestando?
– En el complejo nomas cuando me veía después me alejaba lo más que podía yo.
Truncado Informa: ¿Te acordás de algo más de lo que pasó ese día en la casa del Zorro?
– No solo eso y de su casa me acuerdo bien no sé por qué nunca me borre eso, en la decoración (para ponerle un nombre) cuando estuve vi en el modular la foto de una nena y como para cambiar el ambiente cuando me iba llevando a mi casa le pregunte quien era la nena de la foto y me dijo que su ahijada y yo a esa edad pensaba tiene una ahijada nena!!! (Una foto de una nena de 4 o 5 años aproximadamente).
Truncado Informa: ¿Hace cuánto años fue eso?
-Ahora tengo 33 en ese tiempo tenía 12, así que fue hace 21 años.
Truncado Informa: ¿Se lo pudiste contar a alguien?
-No, no lo había contado nunca, salvo cuando trate de decirle a mi mama que no me creyó.(La madre de la victima y el zorro trabajaban en el gimnasio de gas)
Truncado Informa: Te agradezco.
-Gracias a vos por haber escuchado a esa chica y por escucharme a mi igual.
Testimonio Nro. 1
https://truncadoinforma.com/2018/04/01/contar-un-abuso-el-coraje-en-primera-persona/
Hace tiempo que vengo pensando en si escribir de esto o no… escribo… borro. Me pregunto si va a servir de algo… Hoy llegué a la conclusión de que sí, por lo menos para mi ser.
Cuando era chica, 12 años para ser precisa, no entendía de maldad o malas intenciones. No miraba con miedo ni desconfianza, mucho menos viviendo en un lugar donde “nos conocemos todos”. No iba a desconfiar de una persona que conozco de chica, que me hacía jugar y me daba caramelos, que era compañero de trabajo de mi mamá. El sereno del lugar, no era malo!! ¿como iba a ser malo si el cuidaba ese grande lugar?
O por lo menos eso, no me lo cuestionaba.
Una tarde, la primera de primavera, en ese mismo lugar estaban las carrozas. Y como mi amiguita Negra ya estaba ahí, yo quería acompañarla.
Esta persona había pasado a dejar no sé qué a casa, no estaba mi mamá pero se ofreció a llevarme y acepté.
Íbamos en su camioneta roja, en dirección a gas. Nada raro, hasta que frenó en un kiosco por la calle Mitre pasando Urquiza.
– ¿Querés algo? Me preguntó, a lo que respondí que no, gracias (quería ir rápido a ver las carrozas). Esperé en la camioneta hasta que volvió con una bolsa gigante de golosinas y alfajores.. -Tomá, es para vos! Sonriendo me lo da.
– Primero paso por mí casa a buscar algo ¿Dale? (Pega la vuelta de manzana y entra la camioneta al garaje).
– Baja que voy a tardar un poco.
Un frío me corrió por el cuerpo, pero por miedo o no sé qué, baje y entre…
Cerró la puerta con llave y se hizo el que buscaba algo, mientras yo esperaba lo más cerca de la puerta posible. Sabía que algo malo pasaba…
No encontró nada, no buscó, nada. No era esa su intención.
Se dirigió al baño del cual salió sin remera.
– Me tiro un ratito, estoy re cansado. ¿Sabes hacer masajes?… ¡Vení dale, no seas mala!
Volvió al baño y agarró una crema, la cual me puso en las manos. No sé cómo pero me llevo hasta la habitación. Tenía las manos llenas de crema y el esperaba acostado boca abajo…
No sabia que hacer, no quería tocarlo.
En mí desesperación, con 12 años, lo único que recuerdo después de eso es que fui al baño y no quería salir. Me puse a llorar, como la nena era. Nena que solamente quería ir a divertirse. Ni golosinas, ni plata, ni masajes. Solo quería ir con mi amiguita.
Al ver la situación, que yo me negaba a recibir algo a cambio por lo que él quería y que no paraba de llorar, se distrajo. Aproveche y crucé la habitación, giré la llave y corrí, llorando, lo más rápido que pude hasta mi casa.
El desenlace podría haber sido otro, podría haber termino de otra manera. Pero por suerte, solo por pura suerte lloré, por suerte salí, por suerte corrí, por suerte llegué.
Lamentablemente en ese momento a la única persona que le conté, no era lo suficientemente consciente de lo que me había pasado, lamentablemente no se denunció, lamentablemente no se lo conté a mi mamá a tiempo. Lamentablemente este horrible momento lo tuve guardado 12 años de mí vida. 12 años doliendo, de odio, de bronca, de sentirme culpable porque yo me subí ahí, de miedo, de tristeza.
Con esto no busco nada, la justicia en estos casos sin pruebas no actúa. Solo quiero soltar esta pesadilla… Y pedirles que tengan cuidado con esta persona.
“El zorro” bien lo dice su apodo. El ser más despreciable que conocí en mí vida. Me basta advertir a los demás, y que a nadie le pase lo que me pasó o lo que me pudo haber pasado.
Que cuiden más a sus hijos y busquen la confianza de ellos, que pueden hablar de todo en los momentos justos.
Hoy, afortunadamente tengo contención emocional y psicológica. Por eso agradezco a los que me escucharon, los que me creyeron y ayudaron para que hoy lo pueda hablar.
Yo no me callo más.
Y a esta persona no le deseo el mal. La vida se va a encargar de que no se vaya sin pagar todo el daño que hizo, porque estoy segura que no soy la única que vivió esto.
Todo cae por su propio peso, Zorro.
En vida las vas a pagar.
