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Confirman el procesamiento de la expareja de Jesica Minaglia
El abogado que representa a la familia de Minaglia confirmó a Télam que en las últimas horas recibió una «cédula de 32 páginas en la que el Juzgado de Recursos confirma en todos sus términos el auto de procesamiento» con prisión preventiva de Alejandro Núñez (36) dictado por la jueza de instrucción Noelia Ursino.
De esta manera, el juzgado rechazó la apelación al procesamiento que había presentado la defensa de Núñez.
Jesica Minaglia (30) apareció muerta en su casa de la ciudad santacruceña de Comandante Luis Piedra Buena, el 15 de abril pasado y por el hecho la jueza Ursino procesó con prisión preventiva a su ex pareja, por considerarlo el autor del femicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía, según la resolución.
La jueza también trabó un embargo de tres millones de pesos sobre los bienes del acusado, un expolicía de Santa Cruz con quien la víctima tuvo un hijo que actualmente tiene tres años.
Núñez está detenido en la alcaldía de Pico Truncado, donde fue trasladado tras una serie de manifestaciones en Comandante Luis Piedra Buena.
Según surge del procesamiento, la maestra fue atacada a golpes entre las 19.30 del 14 de abril, cuando mantuvo las últimas conexiones en sus redes sociales, y las 8 del 15, cuando fue hallada muerta.
De acuerdo con la autopsia, Minaglia no murió en el acto sino que hubo «un tiempo de agonía entre el momento del ataque y hasta el momento del deceso», indicó la jueza en su fallo.
De la evidencia recolectada en el marco del expediente, surge para la magistrada que Núñez agredió a la maestra «mediante la utilización de un elemento romocontundente, en reiteradas oportunidades en la cabeza de su ex pareja (…) provocándole las heridas que le causaron la muerte».
Para la jueza, «la única persona con quien (la víctima) tenía un conflicto, y que incluso la amenazaba, era el imputado Núñez».
Además, «una muestra de ADN confirmó que una mancha de sangre en la zapatilla de Nuñez era de Jesica», amplió el letrado de la familia de la maestra.
En la resolución de 26 fojas, la jueza se refirió a audios de la maestra aportados a la causa por una amiga y un hombre al que estaba conociendo la víctima, de los que se desprende que el expolicía no aceptaba la reciente separación, que entraba con cualquier excusa a la casa y que «se ponía como loco» o «estaba desquiciado» ante situaciones con el hijo, la casa y la posibilidad de que la víctima estuviera con otra persona. (Télam)
